Baja la factura de la luz, pero sube el teléfono

La factura de la luz ha registrado el mayor descenso trimestral desde hace años, lo que ha sido todo un alivio inesperado para 22.000 consumidores. Sin embargo, esta rebaja no se registra en el resto de facturas que llegan al buzón de nuestra vivienda. Más bien al contrario, mientras el recibo eléctrico desciende un 6 %, el del teléfono sube.

La cuota de abono, más conocida como alquiler de la línea de Telefónica, se encarece un 2, 9%, al mismo ritmo que la inflación. ¿Cómo afectará al consumidor medio? Esto supondrá que el servicio pasará de los 13, 97 euros a los 14, 38 mensuales. Un aumento ligero que, además, continúa estando por debajo de la media europea, que se sitúa en un 15, 26 euros.

El consumidor medio que tenga una factura sin el servicio de tarifa plana, (unos 20 euros -14 de cuota y 6 de llamadas- experimentará un aumento al mes de 60 céntimos.

Este aumento no afectará a la mayoría de clientes de Telefónica, ya que sólo se aplicará a los que no dispongan de tarifa plana.

Así, quedarán exentos de esta subida aquellos que tengan contratado “Movistar Fusion”; “Planazos” o “Tarifa Plana Hogar”.

Según datos oficiales, cerca del 90% de los minutos teléfonicos en España se realizan a través de la tarifa plana. Por ello, este aumento sólo afectará a uno de cada diez minutos registrados.

El perfil de estos usuarios suelen ser personas mayores, que utilizan poco el teléfono y no usan Internet, por lo que habitualmente no disponen de tarifa plana.